Piel sana y pelaje brillante.
El Omega-3 proveniente del salmón ayuda a reducir la resequedad, picazón e irritación en la piel, promoviendo un pelaje más suave, brillante y saludable. Ideal para perros con alergias o sensibilidad cutánea.
Corazón fuerte y cerebro en equilibrio.
Los ácidos grasos esenciales EPA y DHA apoyan la salud cardiovascular y el desarrollo cognitivo. También ayudan a mantener un estado de ánimo estable y una mejor respuesta al estrés.
Articulaciones protegidas y movilidad activa.
El Omega-3 tiene propiedades antiinflamatorias naturales que ayudan a aliviar dolores articulares y mejorar la movilidad, especialmente en perros mayores o con desgaste físico.
Sistema inmune fortalecido.
Este aceite natural actúa como un refuerzo inmunológico diario, ayudando a tu perro a mantenerse protegido frente a enfermedades y a recuperarse más rápido.
Fácil de dar y delicioso para ellos.
Con un sabor que aman y una textura que se mezcla fácilmente con su comida, el aceite de salmón convierte cada comida en un momento nutritivo y lleno de sabor.